Compromiso de Navidad, y para el 2012.

A usted. . .

A mis lectores, no importa cuantos son,

sino cuanto me soportan.

A mis amigos  que les interesa lo que digo,

no por el contenido, sino por saberme vivo.

A mis amores, que dan a mi alma la carga de pasión

para latir a mil, pergeñando ideas y proyectos, que

aunque no se cumplan, seguirán vivas como yo, por

ser,  mi vida misma.

A  los estudiantes  de Periodismo y Ciencias de la Comunicación:

 Siempre les digo:
"Piensen bien, si pretenden riqueza, por trabajar en los medios de  comunicación masiva, olviden la vocación de ser periodistas.
Para ser, hay que juramentarse. . .

Cumplir los mandamientos claros de la profesión:

 Para ser       Periodista,

Es preciso: 

Primero:      Conocer la noticia. 

Segundo:      Investigar a fondo, reunir las pruebas

                         convincentes. 

Tercero:        Si la noticia configura delito, denunciar en

                         la  Justicia.

Cuarto:         Dar a conocer la noticia sin poner los

                         propios sentimientos.

Quinto:         La información no debe ser contaminad

                         por nada ni por nadie.

Sexto:            El único precio que permite la profesión es la

                         ética.

         

Séptimo:       E l precio:    No es el salario.

                         Salario es:   Ganar por Trabajar.

                         Precio es:     Por no ser ético. 

Octavo:         La diferencia, entre Precio y Salario,

                         está en Ser o Parecer Periodista.

Noveno:        El primer pecado es la obsecuencia,

                         que desconoce  la realidad.

Décimo:         El segundo pecado es el dinero fácil.

                          Te convierte en mercenario.

                               
El que escribe, con muchos años vividos, e independiente, puede manifestar algunas manera de ver, y  de pensar,  para opinar libremente, por que, no vende sus sentimientos ni sus conocimientos al mejor postor, publica cuando puede, donde se lo permiten, pero no compromete,  lo que ve ni lo que oye, relata, tal como lo interpreta, desde su óptica; solo su realidad, para no comprometer el contenido. Pero aclara, que es su realidad,  si se dedica a investigar, quizás tendría que cambiar algunas cosas, pero se expone a no ser autentico en su manifestación, y esto es perder su libertad de opinión.
Esto implica, que opina pero no informa.

Hoy en los medios hay:   Analistas, opinólogos, comentaristas,   y algunos incalificables. . .

Pero verdaderos periodistas, muy pocos, y los de verdad, ¿olvidados,  anulados,  perseguidos,  defenestrados. . . ?

No lo se. . .      pero no se los encuentra.

A los anteriormente mencionados,  y a los independientes, que no aceptan freno . . .  ni bozal, lo mejor de mi corazón.
Aun pretendo ser algún día. . . Simplemente un periodista 

Rodolfo Atilio Griffa.
Director